CONOCE MÁS SOBRE LAS PROPIEDADES DEL CBD
El CBD se está convirtiendo rápidamente en el segundo cannabinoide más popular, consumido y analizado, después del THC. En forma de aceite, se puede utilizar para muchos fines.
El aceite de CBD – o Cannabidiol – está elaborado con las flores, los tallos y las hojas de la planta de cáñamo, una pariente del cannabis. Contiene, como mucho, elementos traza del cannabinoide psicoactivo THC, y, por lo tanto, no “coloca”. Por este motivo se suele utilizar como suplemento para la salud de quienes desean incluir CBD en su estilo de vida.
A diferencia del aceite de semillas de cáñamo, contiene otras vitaminas y nutrientes, pero sigue siendo muy apreciado y un suplemento para la salud cada vez más popular. El aceite de CBD también se denomina “aceite de cáñamo”.
¿QUÉ BENEFICIOS PARA LA SALUD TIENE EL CBD?
El CBD ha sido analizado en laboratorio con menos frecuencia que su primo psicoactivo. Dicho esto, cada vez existen más pruebas de que el CBD posee importantes efectos medicinales propios. Entre los que se incluye su uso como antipsicótico.
Los ensayos médicos más extensos sobre el CBD fuera de Israel, han sido llevados a cabo por GW Pharma – una farmacéutica británica que fabrica medicamentos tanto con THC como con CBD a partir de la planta de cannabis. Esta compañía está en proceso de obtener autorización para lanzar un medicamento de CBD especialmente diseñado para el síndrome de Dravet (epilepsia infantil).
A nivel más práctico y cotidiano, se cree que el consumo de CBD mejora los ciclos del sueño (la calidad del sueño), ayuda a reducir la ansiedad y estrés, y actúa como antiinflamatorio. Por eso se ha convertido en un suplemento dietético tan popular.
¿QUÉ EFECTOS TIENE EL CBD?
El CBD no es psicoactivo – en otras palabras, no coloca. Y, si bien actúa también en el sistema endocannabinoide del cuerpo, parece hacerlo de forma distinta, aunque algunos de sus beneficios son parecidos a los del THC.
A diferencia del THC, el CBD no estimula los receptores CB1 ni CB2 de forma directa. Parece activar otros receptores – concretamente los receptores vanilloides, de adenosina y serotonina, que a su vez modulan las acciones de los receptores cannabinoides de forma directa. Los receptores vanillloides, o TRPV, influyen en la percepción del dolor, la temperatura corporal y la inflamación. Los receptores de adenosina regulan el flujo sanguíneo y parecen mitigar los efectos del THC sobre los receptores endocanabinoides. Los receptores de serotonina regulan la recepción y función de los neurotransmisores (que afecta el estado de ánimo). El CBD continúa bajo investigación, por lo que constantemente se descubren nuevas formas en las que manipula nuestro sistema. Todavía nos queda mucho que aprender sobre sus efectos.
¿PARA QUÉ SE UTILIZA EL ACEITE DE CBD?
Al igual que el THC, se ha demostrado que el CBD tiene efectos antiinflamatorios y antiepilépticos, por lo que se utiliza como complemento para combatir los trastornos del movimiento, el dolor crónico y el TEPT. También se usa para contrarrestar el efecto psicoactivo del THC. Sin embargo, hay que señalar que, si bien su investigación está obteniendo resultados positivos, muchos países no consideran el CBD como un medicamento.
Como ya hemos mencionado, también se utiliza como suplemento dietético, ya que muchos creen que sus efectos sobre el estado de ánimo, la ansiedad y la calidad del sueño, les ayuda a mejorar su bienestar general.
Se puede tomar por vía oral, en cápsulas o incluso vaporizarlo.
¿ES EL CBD SEGURO?
La respuesta es que sí. Las únicas toxinas conocidas del CBD provienen del cultivo de la planta y de las sustancias introducidas durante el proceso de producción (es decir, pesticidas y aditivos). Por ello, se aconseja comprobar la reputación de la compañía donde lo vas a adquirir. Lo natural siempre es mejor.
¿TIENE EL CBD EFECTOS SECUNDARIOS TÓXICOS?
La respuesta es no. Ningún cannabinoide tiene efectos secundarios tóxicos. Dicho esto, antes de comenzar a usar CBD con fines medicinales, lo mejor es que consultes con tu médico.
El efecto secundario más común del consumo de CBD es la inhibición de la producción de saliva, que causa una desagradable sensación de sequedad en la boca. En dosis altas, el CBD también puede alterar o neutralizar ciertas enzimas, cambiando la forma en que nuestro cuerpo metaboliza ciertos medicamentos.
También existen investigaciones preliminares que indican que, en dosis muy altas, el CBD podría empeorar los temblores y la espasticidad asociada con la enfermedad de Parkinson, pero estos resultados no son concluyentes.
Esperamos que ahora tengas una noción más clara sobre el CBD. Todavía hace falta muchas más investigaciones, ¡pero la cosa pinta bien!